jueves, 25 de febrero de 2010

No todo es silencio.

..."el silencio cobarde apaña la maldad que oprime"...

Canción Si se calla el cantor



El presidente electo de Chile también manifestó su repudio ante la muerte de Orlando Zapata.

Leer aquí: http://www.emol.com/especiales/2010/nacional/gobierno_de_pinera/despliegue_noticias.asp?idnoticia=400441

El otro dolor.

Creo que lo peor de una muerte es la ausencia de alternativas. Ante su declaración de final no hay nada que hacer, en ese momento sólo existe dolor, impotencia y desoladoras sensaciones. La parca es la asesina de las posibilidades, con ella termina todo. La vida siempre lleva consigo el encanto de la esperanza. Aunque te presionen el cuello, te amordacen, te lancen lejos de los tuyos convirtiéndote en un zombie habitante de los recuerdos, mientras se tenga aliento otra oportunidad puede florecer.

Ahora, la madre de Orlando Zapata, ve en un ataúd la representación de un genocidio de esperanzas. Ante su cuerpo debe recordar cada fragmento de la vida del hijo asesinado. Los insoportables dolores del parto, la primera sonrisa, el primer paso, las incipientes palabras que mas tarde, cargadas de un sentido libertario, lo llevarían a la muerte. El delito de Orlando únicamente fue ese, verbalizar su desacuerdo contra la dictadura de los Castro, expresar sus deseos de libertad.

El hijo fue asesinado por inanición. La imagino rememorando cuanto tuvo que sufrir para alimentarlo, venciendo la precariedad de un sistema que lo único que ha sabido generar es odio y dolor. De nada sirvieron los esfuerzos para que a su niño no le faltara nada, al final la dictadura mediante una cruenta paradoja logró que muriera de hambre.

El exterminio de Zapata Tamayo es una amarga metáfora, representa a un pueblo que igualmente muere de hambre, no sólo de alimentos sino también de libertad y justicia. Muestra el raquitismo de nuestra realidad, famélicos seres que viven bajo el terror y el dominio de una dictadura de medio siglo. El dolor de la madre de Orlando no se subsanará con nada, sólo lo podrá aliviar el florecimiento de nuevas esperanzas. En nosotros está la tierra fértil, el alimento para la resurrección de un pueblo que no puede seguir callando. Sea nuestro abono el no olvidar.

Pd: Nuestras sinceras condolencias para la señora Reina Tamayo, desde la distancia le pedimos que encuentre fuerzas en la razón de las ideas de su hijo.

Atentamente, Los Kovacs.


sábado, 20 de febrero de 2010

Recuerdos.

El peor y el mejor de los tiempos.

Leer en Una tarde memorable.

viernes, 19 de febrero de 2010

Arrollando en Bilbao.

Elha Kovacs

No son tan majestuosos y multitudinarios como los de Río ni tan llamativos y pintorescos como Mardi Gras, pero los carnavales de Bilbao tienen un encanto especial. Y ese encanto tal vez tenga que ver con su sencillez, con la forma en la que, quien tiene el privilegio de asistir se lo puede apropiar, hacerlo suyo.

El carnaval de Bilbao es un espectáculo que protagoniza la gente que habita esta ciudad. Las cuadrillas de amigos, las familias, viejos y niños, hombres, mujeres, homosexuales, se preparan, con algo de antelación, para salir a la calle con sus originales disfraces. Por la Gran Vía desfilan las carrozas, mostrando la diversidad y apertura de una ciudad habitable. El desfile termina pronto y sigue la fiesta en los bares, que es decir en la calle.

Mientras vivo por segunda vez esta experiencia me regocijo por la fortuna de experimentarla en familia, pero en silencio me pregunto cómo pudo morir en Cuba el carnaval.

jueves, 18 de febrero de 2010

Aaaayyyy que miedo.

Muñequito cubano.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Recuerdo de mi primera Makarenko.

La señora Kovacs nos regala una experiencia inolvidable.

"De mi memoria no se ha borrado aún como la aprendiz de profesora, tras un arranque de ira, partió mi regla recién estrenada con un golpe que le propinó a Raimundo, el niño más inquieto del grupo. Afortunadamente, como regalo de fin de curso de septiembre de 1978, mis padres me contentaron con la vuelta al colegio del que no debí salir de haber tenido seminternado."
Seguir leyendo en:
http://eichikawa.com/2010/02/recuerdo-de-mi-primera-makarenko.html

martes, 16 de febrero de 2010

Rugby y picadillo de soya.

Ichi encontró esta joyita. De madre jugar rugby después de comerse el "rico" picadillo de soya.

http://teveo.icrt.cu/3fjjp7/

Falacias 2: Calidad Educacional.

Toda la estructura social cubana es una madeja de engaños y en ella el sistema educacional cubano ha sido una hebra fundamental. A mediados de los años ochenta graves casos de fraude a nivel institucional comenzaron a menoscabar unos de los “logros” que más intentaba enarbolar la revolución cubana. Ante la normativa que se debía cumplir con el plan anual de aprobados, las direcciones de los establecimientos educacionales comenzaron a presionar a los profesores. Poco a poco los educadores se unieron a la locura y empezaron a ser parte de la falsedad. De pronto, toda la enseñanza elemental estaba plagada de alumnos geniales.

Por aquella época las respuestas a los exámenes eran dictadas por los profesores. No había suspensos y los alumnos con dificultades seguían avanzando de curso sin cumplir con los requisitos elementales. Recuerdo que en una beca las respuestas fueron transmitidas por la amplificación local. Ocurrió que la que dictaba era alumna y en una de las soluciones dijo por los altoparlantes H veinte – refiriéndose al agua- en vez de H2O. No fueron pocos los que copiaron la burrada.

Fue así que el fraude masivo se hizo norma. En el verano del 86 explotó el escándalo. Se prohibió, con las mismas maneras que se instauró. La debacle fue inevitable. La realidad demostraba que la mayoría del alumnado no cumplía con los requisitos básicos para aprobar los cursos en que estaban. Mi aula completa de noveno grado suspendió matemáticas. Después, unos cuantos aprobamos en el examen extraordinario. Ese año, ante la vergonzosa situación se realizó un tercer examen de manera excepcional. Sin embargo, la mediocridad del modelo cubano de educación ya había sido descubierta.

No recuerdo si por aquello hubo defenestración de culpables. Creo que merecían castigo, pero con la atenuante de que el principal responsable de la farsa fue y será un viejo loco que vive sumido en la ilusión de que es el redentor de Cuba.

lunes, 15 de febrero de 2010

Falacias 1: Profesores de nuevo tipo.

Mi escuela primaria estaba frente al paseo del Prado en La Habana. Era una antigua casona que imagino sus dueños se vieron forzados abandonar cuando el castrismo llegó a la isla. Cada habitación del lugar fue convertida en pequeñas aulas y junto con las horribles ampliaciones que se hicieron, la casa fue transformada en una cuartería educacional.

De aquella época recuerdo particularmente cuando cursaba el tercer grado. La que había sido mi profesora hasta aquel momento – Marta Lavín se llamaba y según mi madre era de las maestras de verdad, de las de “antes”- tuvo que abandonar el oficio. Su garganta, después de tantos años educando, no soportó más. Fue reemplazada por una regordeta Makarenko que aún no terminaba sus estudios. Llegó con el uniforme típico con dos tonos de verde, esos que incluían aquellas faldas que eran una especie de short con babero. En aquel tiempo muchas de ellas tuvieron que salir a cubrir el déficit de profesores que se estaba produciendo. Era el año 1980.

Mi nueva profe era una chica de los nuevos tiempos. Llena de moral socialista, liberación sexual y mediocridad a toda prueba. En un viaje que hicimos a Tarará, recuerdo que adquirió fama de ninfómana. A la gordita le gustaba retozar. Poseía grandes habilidades sociales, podía pasarse media hora de una clase hablando con otra persona en la puerta del aula. Nosotros éramos felices, en vez de estar aprendiendo a sumar, jugábamos. Misteriosamente nuestras horas de educación física se vieron triplicadas. Pasábamos mucho tiempo jugando al burrito 21 en el Prado. Total, teníamos 8 años y toda la vida por delante para aprender.

No recuerdo el nombre de esta mujer, sólo su cara y fisionomía. Más allá del desastre que pudo causar a corto plazo en mi educación, no he podido olvidarla por otro motivo. Mis padres decidieron quedarse en Cuba a pesar de que toda mi familia, a excepción de un tío que vivía con nosotros, habían decidido marcharse cuando la desgracia de la dictadura comenzaba. Mi tío por estar en edad militar tuvo que quedarse y prácticamente ser criado por mi madre. Ese año se pudo marchar. La sombra de la duda cayó sobre nosotros. Mi profesora, al conocer la noticia, olvidó su liviandad y falta de profesionalidad. Con una cara circunspecta que descuadraba con su licenciosa vida sexual y dudoso desempeño docente, me interrogó sobre si mi familia tenía intenciones de abandonar Cuba. Yo no contesté nada. Para qué quería la información, sólo Dios sabe. Prefiero pensar que era burda chismosería. Todavía busco su rostro y no sé porque me la represento meneando su regordete culo en Miami al son de alguna orquesta de intercambio.

viernes, 12 de febrero de 2010

Hoy como ayer.

Chávez, al igual que su mentor Castro, miente descaradamente. Reconoce al final del video una verdad ineludible.

jueves, 11 de febrero de 2010

Más sufrimiento provocado por la dictadura castrista.

Aquí se muestran imagenes del entierro de Gloria Amaya, madre de dos prisioneros de conciencia cubanos. Mis respetos para todos los que en Cuba se oponen abiertamente a la dictadura lejos del oportunismo servil.
"Si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden facilmente"




sábado, 6 de febrero de 2010

Necesitamos inspiración.

Después del dramático fracaso de la revolución cubana, los isleños hemos perdido la capacidad de crear y creer en sueños colectivos. Ningún objetivo nos une como nación. El desmembramiento de la sociedad cubana provocado por la dura necesidad del exilio y la manipulación dictatorial, ha borrado cualquier posibilidad de unirnos en aras de un bien común.

El lógico deseo del fin de la dictadura tampoco nos une. La intención de acabar con medio siglo de atropellos y desgracias, se atasca en el fango que provoca la mezcla del oportunismo, la liviandad, el radicalismo ciego y la falta de una alternativa pensada, al mismo tiempo que viable. Ni siquiera una de nuestras religiones preferidas – la pelota- puede aglutinarnos. El equipo Cuba post revolución, entrampado en la politización, nunca ha fungido como una selección nacional que represente las expectativas de todos.

En la película Invictus, se recrea como Mandela y el equipo de rugby sudafricano pudo unir a un país dividido por lacerantes y profundas heridas. El personaje que encarna a Mandela, propone que la esquiva y difícil unidad sólo se puede lograr partiendo del ejercicio del perdón y generando inspiración. Finalmente, el equipo sudafricano gana la copa mundial, pero el verdadero trofeo fue conseguir que toda Sudáfrica creyera que un sueño común era posible.

Cuba necesita de lo mismo. Más que un líder que sea el catalizador del milagro, es necesario que recuperemos la capacidad de soñar como nación. El tipo de quimera poco importaría siempre que nos saque del lodo de cincuenta años de desencuentros. Una selección nacional de pelota que incluya a los jugadores cubanos de todas las latitudes y que permita recuperar la calidad de antaño podría ser un bonito comienzo. Un equipo Cuba democrático que gane campeonatos que satisfagan a todos, es un sueño en el que muchos nos aventuraríamos a creer. Para que ese deseo se haga realidad los cubanos deberíamos inspirarnos en las palabras con que finaliza la película: ser amos de nuestro destino y capitanes de nuestras almas.

PD. Le apuesto a Ichi un lechón asado a que Morgan Freeman gana el Oscar. En agosto viajo a Miami para saldar la apuesta.

El equipo de Rugby argentino con la nación tatuada en el alma.

miércoles, 3 de febrero de 2010

A cada cual según su pecado.

La gracia fundamental del cristianismo radica en el perdón. Siempre es conveniente tener bajo la manga el as de la redención. Los malos comportamientos deberían ser borrados con un último y apurado arrepentimiento. La trampa está en que hasta ahora no existe prueba de que el ardid resulte. Nadie ha recibido mensajes como “Coñooo, me salvé” o “Me embarcaron, ahora estoy – literalmente- en llamas por toda la eternidad”.

Fidel Castro aprendió bien la lección en el conspicuo colegio católico donde estudió. Aparte de ser un artista en prometer cosas sólo comprobables después de la muerte, también ha usado las herramientas del pecado y el perdón con maligna astucia. Los pecados casi siempre conllevan sentimientos de culpa y ésta inevitablemente reprime el comportamiento mientras se busca el ansiado perdón. El castrismo se ha empeñado en crear un manto de culpabilidad sobre la sociedad cubana. Ha construido un tejado de cristal sobre los cubanos y es lógico que nadie se atreve a lanzar pedradas.

La revolución cubana fue una máquina de circunstancias extremas y embriagantes. Mientas el dictador elucubraba cómo eternizarse en el poder, la mayoría del pueblo cubano se involucraba en los nuevos tiempos. Así comenzaron a caer sobre los cubanos todo tipo de culpas, que más tarde los privaría de usar el derecho a reclamo. Una victoria deportiva dedicada al líder, una canción, un discurso, ser elegido símbolo de la represión por interpretar el personaje de una serie de televisión popular, se convirtieron en pecados que colocaron a muchos en la espera interminable del perdón.

En el caso de Cuba hay pecados de variadas calañas, algunos impuestos y otros asumidos por propia decisión. El impacto negativo de ellos determinará cuál será el castigo de quien los cometa. Algunos incluso ni califican para tal denominación. Marquetti le adjudicó a la revolución la autoría de unos de sus jonrones más famosos. También estuvo en la batalla de Girón – Bahía de Cochinos para el que así lo quiera- y sin embargo creo que nadie lo recuerda por eso. Para mí y otros muchos, ha sido el mejor primera base de los Industriales, el de los batazos decisivos, el ídolo del número cuarenta en su espalda. El pelotero ya está perdonado. Otros con semejantes pecados deben mirarse en su espejo y vencer la culpabilidad. Los de los pecados horrendos tendrán que seguir esperando por el castigo.

martes, 2 de febrero de 2010

Más de la señora Hebe de Bonafini.

Esto es lo que se dice de la señora que insulta a las Damas de Blanco.


Víctimas de segunda clase.

Ser disidente en Cuba requiere, además de un inmenso valor, una compasión que confluye al martirio. Las personas que escogen este camino no sólo se enfrentan a la visceral represión del sistema. También deben soportar la indolencia de un pueblo, que de tanto ser manipulado, ya no quiere reparar en los verdugos ni apoyar a los que se oponen a la fuente del sufrimiento cubano. Los disidentes están solos, luchan por una causa en la que los principales afectados prefieren pensar en otra cosa. Ni gobernar, ni ser gobernados, simplemente escapar.

Los que se oponen al castrismo en la isla no sólo deben lidiar con la indiferencia de su propio pueblo. Fuera de Cuba la dictadura parece haber extendido parte de su embrujo. Mientras el mundo repudia a regímenes totalitarios de toda índole, los Castro siempre alcanzan algún tipo de perdón. Las atrocidades que se cometen en Cuba y las víctimas que generan parecieran ser de otra clase. Un cubano perseguido, un prisionero político, un pobre loco muerto no generan las mismas sensibilidades que los de otras latitudes.

Las Damas de Blanco, mujeres que ejercen el derecho elemental de abogar por sus familiares reprimidos, muchas veces son denostadas incluso por movimientos que defienden causas muy similares. Tal es el caso de las Madres de la Plaza de Mayo y su fundadora Hebe de Bonafini. Esta argentina, señora de apariencia bonachona y hablar procaz, ha insultado de manera inadmisible a las cubanas. Las ha tildado de representantes de la muerte y el terrorismo. La señora Bonafini parece una amarga muñeca sobre las rodillas del ventrílocuo Fidel Castro.

Con estas declaraciones no solo se convierte en la voz de un dictador, también menosprecia al pueblo cubano. Según la argentina, nuestras víctimas no merecen ser defendidas y por ende respetadas. Sobre Bonafini vuelan sospechas de algunas atrocidades que ha cometido utilizando la causa de los desaparecidos argentinos. Esto deberá evaluarlo el pueblo argentino. Para el cubano solamente exijo respeto.

lunes, 1 de febrero de 2010

Arrastradera Kafkiana.

Aquí les dejo un video que supera al surrealismo, creando una nueva categoria aún sin definir. No se pierdan la verborrea incoherente del locutor. Espero que me queden pocas cosas como esta por ver. Los comentarios que aparecen en el video no son míos.



Gracias a Dios existe el cuero. Aquí va una parodia a propósito de la canción.