Carlos Alberto Montaner es el anticastrista mas apacible que he visto. Los argumentos que siempre ha utilizado son agudos, profundos, bien fundamentados, claros y precisos. Nunca he presenciado, escuchado, ni leído una descalificación grosera que lleve su firma. Entonces, ¿por qué el gobierno cubano y su secuaz Jean-Guy Allard insiste en desacreditarlo tan soezmente?
Montaner utiliza la sabia palabra para atacar a la tira
nía de los Castro. Pero la brutalidad manipuladora siempre falla ante tal arma. El intelectual cubano nunca ha respondido con gritos a los alaridos histéricos que emanan de la cúpula castrista. Por el contrario, ha aplicado el discernimiento, desnudando a la dictadura en sus mentiras vitales, esas que sustentan el encanto internacional de la falacia llamada revolución cubana. Para la ceguera megalómana que gobierna en Cuba, lo anterior es un pecado que bien pudiera incluirse entre aquellos calificados como capitales.
Jean-Guy Allard endosa cualidades a Montaner que son propias de él mismo. Sólo un psicópata puede escribir tantas estupideces con el único objetivo de satisfacer a su amo[1]. También transmite experiencias de vida de otros al cubano. El único hijo de papá[2] que se tornó extremista, después revolucionario y más tarde dictador es su jefe Fidel Castro. Por si fuera poco, el periodista canadiense –en su demencia servil- implícitamente se delata como posible agente de la inteligencia castrista. Si no fuera así, cómo puede manejar entonces tantos datos secretos de la vida de Montaner, que son propiedad del “inexpugnable” aparato represivo cubano.
A juzgar por los hechos, el real pecado de Montaner es no percatarse que los perfectos idiotas no son sólo latinoamericanos.
Montaner utiliza la sabia palabra para atacar a la tira
nía de los Castro. Pero la brutalidad manipuladora siempre falla ante tal arma. El intelectual cubano nunca ha respondido con gritos a los alaridos histéricos que emanan de la cúpula castrista. Por el contrario, ha aplicado el discernimiento, desnudando a la dictadura en sus mentiras vitales, esas que sustentan el encanto internacional de la falacia llamada revolución cubana. Para la ceguera megalómana que gobierna en Cuba, lo anterior es un pecado que bien pudiera incluirse entre aquellos calificados como capitales.Jean-Guy Allard endosa cualidades a Montaner que son propias de él mismo. Sólo un psicópata puede escribir tantas estupideces con el único objetivo de satisfacer a su amo[1]. También transmite experiencias de vida de otros al cubano. El único hijo de papá[2] que se tornó extremista, después revolucionario y más tarde dictador es su jefe Fidel Castro. Por si fuera poco, el periodista canadiense –en su demencia servil- implícitamente se delata como posible agente de la inteligencia castrista. Si no fuera así, cómo puede manejar entonces tantos datos secretos de la vida de Montaner, que son propiedad del “inexpugnable” aparato represivo cubano.
A juzgar por los hechos, el real pecado de Montaner es no percatarse que los perfectos idiotas no son sólo latinoamericanos.
[1] El periodista califica a Montaner como “psicópata y amnésico”.
[2] En esta oportunidad, llama a Montaner “hijo de papá convertido en extremista”.
CAM es un gran cubano, genial como escritor y analista político, igualmente prestigioso entre los amantes de la democracia. Es lógico que el aparato castrista intente desacreditarlo de cualquier manera. CAM es, para muchos cubanos, por quien nos gustaría votar como presidente en unas elecciones libres, plurales y transparentes.
ResponderEliminarRazones suficientes para incorporarlo en mi blogroll. Gracias.
ResponderEliminarTengo la misma opinion que Ud. de CAM. El libro "Viaje al corazon de Cuba" es uno de los mejores analisis que he leido sobre toda la historia politica de Cuba.
ResponderEliminarFelicitaciones por su blog, es uno de mis favoritos.
Es logico que el gobierno trate de desacreditar a Carlos Alberto Montaner, el es una de las figuras, si no la mas, del exilio historico con mas prestigio. No es de extranar que Arturo Lopez Levy, tambien lo critique. Muy importante de su parte salir en defensa de todo Cubano digno que desea para Cuba una verdadera democracia.
ResponderEliminarCarlos, un abrazo desde Naples