jueves, 21 de octubre de 2010

Pensando la identidad cubana.

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ConferenciaCMdC

lunes, 18 de octubre de 2010

Un nuevo consenso de cambio para Cuba.

Por Elha Kovacs

Impensables podían parecer todavía hace algunos años las medidas recientemente tomadas por el gobierno cubano. El despido paulatino de medio millón de trabajadores es una muestra más de la crisis sistémica que atraviesa la sociedad cubana. Al lado de la impopular medida, el gobierno abre nuevamente la posibilidad del cuentapropismo, aprobando la realización de un conjunto de actividades, en su mayoría del sector de los servicios, aparentemente como alternativa de reinserción laboral para los cientos de miles de trabajadores estatales que saldrán a la calle a partir del próximo año. Pero una cosa es recibir la noticia a más de mil kilómetros de distancia y otra muy distinta constatar las reacciones in situ que ella ha generado, al menos a primera vista.

Un amigo cubano me decía, “por mucho menos que eso en cualquier otro lugar del mundo la gente se hubiera tirado para la calle a protestar”. Y sin embargo, aquí en Cuba lo único que se ha multiplicado es el miedo y la filosofía del sálvese quien pueda. En efecto, cuando calmadamente compartes con amigos, conocidos o familiares, cada uno se hace eco del miedo social y la desesperanza que impera en la isla. Casi sin distinción, todos esperan que como resultado de estas medidas aumente de manera significativa la criminalidad y el vandalismo social de aquí a fines de año.

Profesionales jóvenes, con cierto conocimiento de la realidad social cubana y herramientas para su comprensión, entienden estas medidas como otras más de las que se han tomado en el último tiempo. Reconocen su envergadura y posibles efectos sociales adversos pero piensan que a la vuelta de seis meses se estará hablando de cualquier otra cosa y esto se habrá olvidado. Dicho así pareciera que la situación actual de Cuba ha llegado a un punto tal que, por impopular que sea una medida que a la larga afectará a todos, la gente echará mano de sus recursos y estrategias personales de sobrevivencia, dará vuelta a la página y seguirá pensando en cualquier otra cosa en lugar de la posibilidad de modificar las circunstancias y condiciones que dan origen al dramático escenario con que uno se topa al llegar a la isla.

Recordé entonces una tesis que me permitió comprender mejor el triunfo y consolidación de la alternativa revolucionaria en Cuba en cuanto proceso de subversión social. La existencia de un consenso de cambio favoreció efectivamente el apoyo a la vía revolucionaria a fines de los años cincuenta del siglo pasado. Este consenso expresaba no sólo las ansias de liberarse de una dictadura que a la mayoría molestaba en términos políticos, sino también de los frenos que ésta ponía a las ansias de movilidad social, bienestar económico, así como los reclamos de moralización social que la sociedad cubana había acumulado durante su existencia republicana. La fragilidad de la memoria social y el miedo son los peores enemigos de cualquier proyecto de cambio social. Ambos factores corroen no solo a la persona sino también al entramado o tejido social. Si no somos capaces siquiera de ponernos de acuerdo en lo que no queremos, cada vez se hace más incierto articular cualquier atisbo de consenso de cambio del estado de cosas en la Cuba actual. Mi pregunta final es, ¿qué más tendremos que esperar?

viernes, 15 de octubre de 2010

Represión invisible.

Recientemente, los medios de comunicación españoles, han criticado duramente a las dictaduras de China y Corea del Norte. El otorgamiento del Nobel de la Paz en un caso y la conmemoración de los 65 años de la creación del partido único en el otro, han sido las causas de la oleada criticista.

Frente a China, con larga experiencia totalitaria, la prensa española se muestra “sorprendida” con las actitudes represivas que el régimen ha tomado contra la esposa del premiado disidente. La preocupación mostrada se limita sólo al evento puntual y a la connotación del hecho. Quedan olvidadas el resto de las víctimas, huérfanas de exacerbación mediática, que han sufrido por años la opresión cotidiana. Frente al caso norcoreano la actitud es la misma.

A pesar de la falta de continuidad en las críticas a regímenes que se caracterizan por ser asiduos y férreos violadores de los derechos humanos, se agradece que -aunque sea puntualmente- las atrocidades sean mostradas. Términos como ‘dictadura comunista’, ‘represión ciudadana’, ‘falta de libertades’, son frecuentes en las notas de prensa. Sin embargo, hay otra dictadura más “cercana” que es tratada con guante de seda. El totalitarismo cubano y sus medios represivos parecen ser de otro orden. Aún en el caso de Zapata –disidente isleño fallecido después de una huelga de hambre- las críticas siempre fueron tenues.

Rara vez el desgobierno de los Castro es reconocido como dictadura y los derechos humanos en la isla parecieran no ser vulnerados diariamente. Como colofón, el gobierno español funge como vocero de la dictadura cubana ante la Unión Europea pidiendo el fin de restricciones.

El sufrimiento isleño para los medios españoles es invisible. La última colonia sólo es noticia por sus bendiciones geográficas y las exuberantes mulatas. Olvidan que allí, en el medio del Caribe, un dictador nos robó los sueños hace más de medio siglo. Ignoran que somos una nación apuñalada por la desesperanza, que no tiene ni un solo minuto que prometa como futuro.


martes, 12 de octubre de 2010

La trampa.

En Cuba la marginalidad tiene un sentido más amplio que el tradicional. El régimen totalitario sólo ampara a sus seguidores incondicionales, provocando que la más mínima opción de diferenciación o disentimiento sea suficiente para convertirse en marginal. Los Aldeanos se han vuelto en la voz del ejército de marginales de la isla.

Las letras de sus canciones, hechas con el lenguaje típico de las barriadas mas pobres y plagadas con palabras soeces, son sal sobre las heridas que ha provocado la dictadura en la sociedad cubana. Estos jóvenes de menos de 30 años hablan de temas que ponen al desnudo el fracaso de la revolución cubana. Denuncian los males que nunca pudieron ser superados: pobreza, desigualdad social, corrupción, violencia policial, discriminación racial y una patológica desesperanza.

Están lejos del cripticismo de los trovadores que alguna vez intentaron criticar las atrocidades del régimen cubano, aunque fuera en su falencias mas etéreas. Su estilo es directo y por ende muy popular. Son para los jóvenes de ahora, lo que fueron hace ya 20 años, Santiago Feliú, Carlos Varela y Pedro Luis Ferrer. No sé si por causas del deterioro educacional isleño o porque simplemente la gente quiere hablar de una manera que los aleje de la institucionalidad, estos nuevos irreverentes complacen con un lenguaje crudo y elemental.

Los trovadores que protagonizaban la rebeldía de principios de los 90, finalmente fueron diluidos en la espesa miasma del sistema castrista. Ellos, fueron absorbidos por la maquinaria manipuladora. Ya muy pocos quedan que se sientan identificados con aquellos insolentes de entonces. Ahora Los Aldeanos se enfrentan a la misma peligrosa trampa. Dentro de poco actuarán en Miami. Es una oportunidad única para cualquier artista que intente sobrevivir en el mercado latino de la música, pero para estos muchachos significa algo más. En primer lugar su fama de “prohibidos” inmediatamente será cuestionada, si son perseguidos cómo es que puedan salir de Cuba. Por otra parte, quizá víctimas de un adoctrinamiento visceral, ellos han hecho críticas sobre las opiniones de artistas cubanos residentes en Miami, validando la opción de que el criticismo solamente es honesto si se hace desde la isla. Por último, y por carecer de íconos contemporáneos que simbolicen las nuevas revoluciones, Los Aldeanos se aferran a viejas leyendas como Camilo Cienfuegos o el Che Guevara, el argentino definitivamente es una mala elección si se tiene como fin promoverse en Miami.

El dúo de hip hop debe aprovechar la oportunidad, mantenerse fiel al estilo que lo ha hecho resonar. Usando el lenguaje del barrio, no deben dejarse acaballar por unas ratas que tienen vasta experiencia en estos menesteres. No pueden permitirse el lujo de caer en la trampa, si no dejarán nuevamente sin voz a miles de jóvenes cubanos.

jueves, 7 de octubre de 2010

Da lo mismo.

Alguien dijo alguna vez que hay pueblos que no quieren gobernar ni ser gobernados, sólo quieren escapar. El deterioro social de Cuba ha llegado al extremo, que ni siquiera se intenta la tercera opción. Una vez obviada la necesidad vital de libertad, todo se reduce al cubanísimo término de resolver.

En la isla todo pasa por la supervivencia instantánea, sólo importa el ahora, vivir la condición mas elemental del ser humano. El hedonismo precario a cualquier precio, poco importa bajo qué circunstancias y utilizando qué medios, todo vale, el problema es ir tirando, ir resolviendo, esa es la norma. La costumbre se arrastra al exilio y en condiciones que exigen otro comportamiento, esta forma de vivir finalmente se marchita alejando peligrosamente la esperada prosperidad. Antiguamente el exilio –principalmente el de Miami- era un ícono de lo que podía lograrse fuera de la isla. Ahora, ahogado en esas malas costumbres, sólo ofrece una imagen de desesperanza y fracaso.

El nihilismo insular es tan grave que ya no se mira a Miami con el hambre de antaño. En buen cubano nadie está para eso mientras haya un trago de ron y exista el Malecón, total, los que están allá se están comiendo un cable, lo único que hacen es trabajar y pagar cuentas. Miami con su nueva gente quejosa, ya no llama la atención.

Es por eso que quizá la emigración hacia Estados Unidos está disminuyendo, más allá de los estudios y el análisis de las estadísticas. El cubano de hoy está aburrido de todo, hastiado de la realidad, pareciera que respirar es su único anhelo, así es muy difícil plantearse una emigración.

martes, 21 de septiembre de 2010

Revolution

Documental sobre Los Aldeanos. Muy buena realización.


domingo, 12 de septiembre de 2010

La altanería del viejo.

Hace poco, Fidel Castro en un evidente acto de prepotencia más que de culpa, se refirió a la represión que han padecido los homosexuales en Cuba bajo su dictadura. Las declaraciones se pueden interpretar como un "sí, fui yo y qué...".

Aquí los dejo con imágenes del documental de 1984 Conducta Impropia. En ellas aparecen una narración de Carlos Franqui describiendo los hechos y el sabio análisis de Cabrera Infante.


lunes, 26 de julio de 2010

Impresiones de Matos.

Huber Matos narra sus experiencias durante el presidio político que padeció. Las imágenes corresponden al documental Nadie Escuchaba, 1987, de Néstor Almendros.

domingo, 25 de julio de 2010

Listos y perdedores

En el filme Malcom X hay una escena donde el líder negro al terminar un discurso se percata que un antiguo compañero de tropelías –interpretado por Spike Lee- estaba dentro del público y lo saluda con efusividad. El amigo responde los saludos y acto seguido lo invita al bar de la esquina. Allí se sorprende de que el nuevo Malcom no bebe, que ha cambiado, que ahora se ocupa de la lucha contra el racismo. El viejo conocido, aún atónito, le responde con frases que en ‘buen cubano’ serían mas o menos así. Brother, me gusta en lo que estás metido, seguro que hay algún dinerito de por medio, pero coño afloja, estás hablando conmigo, así que ahora que nadie nos ve, vamos a darnos unos buches y me cuentas cómo yo puedo meterme en esto, seguro que jebitas y vacilón no faltarán, además de que quiero ganarme un barito.

Malcom insiste en que su actitud es auténtica e invita al otro unirse a la causa. Pero no le resulta, el amigo rechaza la oferta convencido de que el Sr. X es un cabroncito que lo está dejando fuera del negocio. Algo parecido nos pasa hoy a los cubanos. Castro nos ha dividido a tal punto que la desconfianza es el sentimiento primario entre los isleños. No confiamos en nadie, ninguna actitud ajena es loable o altruista, menos las que se emprenden contra el dictador. Somos tan listos que llevamos medio siglo sufriendo, dejándonos arrebatar todo, hasta la capacidad de fomentar un mínimo de credibilidad. El descrédito es utilizado por todos, desde los adalides del régimen hasta los mas férreos detractores. Menos mal que pese a todo, algunos siguen luchando.

miércoles, 21 de julio de 2010

Himnos.

Consultado sobre la decisión del gobierno chileno de otorgar refugio a los presos políticos cubanos, el escritor Jorge Edwards dijo que Chile era: “el asilo contra la opresión”. La frase, para cualquiera que no haya nacido en el país del sur o estuviera relacionado estrechamente con él, podría parecer una acertada inspiración del escritor.

Lo cierto es que lo dicho corresponde al último verso de la canción nacional chilena. El himno, como casi todos los latinoamericanos, habla de exaltación a la patria y la búsqueda de la libertad a cualquier precio. El cubano no es excepción, en esencia es una arenga para lograr los mismos objetivos. Lo vergonzoso es que después de 108 años de vida republicana, Cuba siga añorando el elemental derecho de vivir en Libertad. “Morir por la patria es vivir” pareciera ser el verso que más recordaba Orlando Zapata o el que inspira la terquedad heroica de Guillermo Fariñas.

Quien inició las negociaciones –por motivos inescrutables- de ofrecer asilo a los presos políticos cubanos fue el gobierno español. Ante esta situación es posible sentir vergüenza al recordar una de las estrofas eliminadas del himno cubano original. Hemos tenido que ser ayudados por aquellos que en alguna ocasión se les dijo: “ No temáis los feroces Iberos. Son cobardes cual todo Tirano.”

Este es el legado que nos dejan la tiranía de Fidel Castro, sus secuaces y abyectos seguidores. Han destruido la dignidad nacional, nos han sumido en la afrenta y el oprobio. Parafraseando el himno del país del sur, Chile nos ofrece asilo ante la imposibilidad de que Cuba pueda ser tumba de hombres libres. Esperemos que en esta oportunidad, aún valientes, corramos a por armas que no provoquen derramamientos de sangre.

domingo, 18 de julio de 2010

Diferentes acordes de una misma sinfonía.

El Concierto es una película que a pesar de mostrar un excelente humor, al final me ha resultado tristemente conmovedora. El filme aborda el tema de las heridas que quedan después de una dictadura comunista, de sus damnificados y la búsqueda constante de la redención. Es la historia de músicos destruidos por el fanatismo ideológico y totalitario de una Rusia en su última década de comunismo. Sus vidas actuales, aparecen llenas de miserias y frustraciones en medio de un capitalismo permeado por las ineficiencias y corrupciones heredadas del anterior sistema.

El tema me resultó inevitablemente cercano. Castro clonó para la isla todas las atrocidades que se engendraron en la Unión Soviética, los mismos métodos, las mismas canalladas, el hábito de reprimir y borrar la más mínima muestra de independencia intelectual o artística. No es difícil recordar el entierro en vida que sufrieron las longevas estrellas de Buena Vista Social Club, su desaparición por años sin aparentes justificaciones. Los talentos de Paquito d´Rivera y Arturo Sandoval tuvieron que escoger el escenario del exilio. La excelente música que interpretaban o componían era considerada “enemiga”.

Estos músicos cubanos, al igual que los personajes de la película, lograron a base de esfuerzo y talento la redención definitiva. Tuvieron el aplauso y el reconocimiento de un público que admira su arte sin condicionamientos políticos o ideológicos. Cada sala de concierto llena o las excelentes críticas son bofetadas a la cara del totalitarismo castrista. El nombre de estos artistas quedará como el patrimonio rescatable que Cuba ofrece al mundo. A Fidel Castro, en el guión de la historia cubana, solo le queda el personaje triste de Salieri.

martes, 13 de julio de 2010

Mi tributo a Olga Guillot.

Gracias a mi padre y tío materno -melómano empedernido- las estrellas musicales del pasado pre revolucionaro cubano, para mí no fueron desconocidas. En mi casa había un gran número de discos de vinilo. Entre ellos sobresalían las grabaciones de los boleristas. Allí se encontraba el timbre trasnochado, con aire de cantina y bar marginal de los Orlandos - Contreras y Vallejo-, también el estilo casi tanguero de Blanca Rosa Gil, el histrionismo excesivo de Olga Guillot, La Lupe y Moraima Secada.

La Guillot ha muerto sin ver a Cuba sin Castros, puede ser que con ella fenezca una época pero será una nueva hoja en nuestra larga novela de nostalgias, esa que algunos preferimos leer una y otra vez simplemente porque es nuestra.


Aquí les dejo con unas de las especiales interpretaciones de La Guillot.

Sentido Inverso.

Viví durante casi catorce años en Chile y aunque durante mucho tiempo – consecuencia de un cubanísimo patriotismo poco práctico- no quise adquirir la nacionalidad chilena, finalmente poseo tal condición. Al país del sur le estoy agradecido, me ha dado la posibilidad de experimentar la sensación de sentirme libre, de ver nacer a mi hija en la misma condición y de que mi mujer también disfrute el mismo sentimiento.

Ahora con cierto orgullo veo que el gobierno chileno, muestra disposición para recibir a los presos de conciencia cubanos forzados al destierro. En otros tiempos fueron chilenos los que – huyendo de la dictadura pinochetista- se refugiaron en Cuba. Poco importa que beneficios propagandísticos obtuvo Castro con recibirlos, es sabido que cada acción suya está permeada por la manipulación extrema y el ansia de eternizar su totalitarismo. Lo cierto es que muchas personas del país del sur – aunque con ideas que no comparto- salvaron sus vidas y garantizaron la de sus hijos al poder refugiarse en la isla. En la actualidad Chile devuelve la mano.

Aquellos chilenos pudieron vivir incluso con mejores condiciones que la mayoría de los cubanos, muchos se hicieron profesionales y algunos no han regresado a su terruño a pesar de que ya Chile vive en democracia. Los cubanos que puedan arribar a la tierra de Neruda, lo tendrán un poco mas difícil, deberán insertarse en una sociedad muy distinta, en condiciones desventajosas, sólo contarán con su capacidad de sacrificio, talento, disposición y el necesario aguante.

Muchos de los chilenos que volvieron a Chile con títulos universitarios obtenidos en Cuba, muestran escasa gratitud. Varios incluso han pedido un trato diferenciado -con relación a los profesionales exiliados cubanos que estudiaron en las mismas universidades- a la hora del reconocimiento de los títulos obtenidos en la isla. Los cubanos que ahora puedan empezar una nueva vida en el angosto país, espero que con los años cumplan con la responsabilidad moral de agradecer la oportunidad de la sobrevivencia de manera más loable.

Yo prefiero quedarme con la actitud de Matías, un chileno que estudió Derecho en Cuba. Hoy ejerce en Chile y dice que a los cubanos no les cobra, doy fe de ello, a mí no me cobró. Con acento mezclado suele decir: aquello está de madre pero yo estoy agradecido.

viernes, 25 de junio de 2010

En creatividad no nos ganan.

Un poco de cuero antes del partido mundialista entre Chile y España.



Composición fotográfica: El chino






martes, 22 de junio de 2010

Otra vergüenza para el Catrismo.

El hombre de este video argumenta sentir vergüenza, los avergonzados deberían ser los que desgobiernan Cuba.

La noticia fue leída por primera vez en el blog de Ichikawa. http://eichikawa.com/2010/06/prefiero-morir-aqui-que-volver-a-cuba.html


viernes, 18 de junio de 2010

Bielsa el alquimista.

De todos los equipos en el actual mundial de futbol, quizá el que mas logros haya conseguido con menos talento es el chileno. Marcelo Bielsa ha logrado el sueño de convertir el plomo en oro. No lo ha logrado con conjuros, ni oscuras ciencias, simplemente – y como los auténticos alquimistas- ha estudiado a los jugadores chilenos en su esencia mas íntima.

El chileno generalmente es tímido y apocado, necesita que su voz se diluya entre el tumulto, sólo gritan si el entorno les favorece. Para el mundial de 1998 – último mundial en el que participaron- Chile clasificó en la ultima posición de las clasificatorias sudamericanas y sin ganar un solo partido como visitante. En cambio como locales fueron casi invencibles, la selección argentina fue la única capaz de vencer en Santiago. Era la época en que la selección chilena contaba con Marcelo Salas e Iván Zamorano, este último líder goleador de aquellas clasificatorias y Salas el segundo. Durante dicho mundial, el equipo suramericano no fue capaz de ganar ningún partido, pasó a segunda fase y fue eliminado por Brasil. Parecía que Chile sólo era capaz de jugar bien con el respaldo de su público a pesar de que contaba con una generación de buenos jugadores.

Creo que el principal mérito de Bielsa – más allá de su sabido profesionalismo y obsesión futbolística- es haber revertido esa situación. El entrenador argentino descubrió como hacer que el jugador chileno jugara sin miedos escénicos. Ha obtenido lo mejor y algo más de jugadores que no sobresalían por su talento. La selección chilena ha aprendido a ganar fuera de su terruño, se ha crecido y juega como los equipos del más alto nivel. Lo que pueda acontecer en este mundial puede ser prueba y consecuencia de que finalmente Chile juegue sin timidez. Bielsa ha logrado el milagro que muchas personas buscan toda la vida, obtener buenos resultados con muy poca materia prima disponible. Que Chile pueda seguir por este camino cuando Bielsa no esté, es harina de otro costal.

lunes, 24 de mayo de 2010

Dios los crea.

Trailer del documental Líbranos del Mal. Muestra una de las tantas atrocidades cometidas por los nuevos amigos de los Castro.

Algo huele mal.

Las iglesias cristianas cubanas, tanto protestantes como católicas, siempre han tenido posiciones algo tímidas respecto de la dictadura castrista. En algunos casos sus actitudes han rozado el ridículo, resultando casi inevitable no pensar en algún tipo de oportunismo institucional. En los primeros años del gobierno revolucionario las relaciones con la iglesia católica tuvieron amargos episodios que devinieron en una especie de tregua en la guerra por el Dios a venerar, Marx o el de siempre.

Inevitablemente se impuso el alemán y la jerarquía católica se limitó a patalear por la preponderancia perdida. Con vocación de plañidera, lamentaba los preciados bienes arrebatados mientras Cuba se hundía en el descalabro valórico al que solo conduce la falta de libertades elementales. Las iglesias cerraron sus puertas, quizá esperando días mejores o a lo mejor aguardando por el fin de los tiempos. Castro se hizo con la mayoría de almas, corderos que habían sido abandonados por sus pastores.

El tiempo trajo la caída del dios adoptado. El comunismo sucumbió como una epidemia ante la vacuna del sagrado mercado. El dictador caribeño, inescrupuloso por excelencia, centró su mirada nuevamente en las instituciones religiosas. Le dio preponderancia a las protestantes, al fin y al cabo podía validar a Lutero como un agente subversor de los poderes establecidos y estas iglesias nunca habían sido rivales directos. El papel de los líderes protestantes se volvió patético, en aras de degustar un pedazo ínfimo del pastel del poder, se volvieron un elemento más del circo castrista. Es difícil olvidar a Raúl Suárez, por esa época presidente del Consejo Ecuménico cubano, como único votante público en contra de la pena de muerte en la Asamblea Nacional del Poder Popular.

En esos tiempos de acercamiento, la iglesia católica se limitó a servir de intermediaria entre la opresión y la caridad mundial. Comenzó a repartir, fuertemente vigilada, las ayudas internacionales que pretendían aliviar la crisis del pueblo cubano, una crisis en la que ellos hicieron muy poco por evitar. A diferencia de otros países del continente, donde la iglesia católica fue un actor fundamental en la lucha contra las dictaduras locales – como es el caso de Chile- la cubana ha tenido una actitud pasiva, contemplativa y de poco compromiso con el sufrimiento de sus seguidores. Ahora, cuando el poder da señales de debilidad, aparece como salvadora y comprometida. El Castro menor crea la ilusión de que cede, la iglesia de que interviene. ¿Cuáles son las monedas de cambio? Solo Dios lo sabe. Esperemos que no sea el alma de la nación cubana.

martes, 18 de mayo de 2010

¿Qué hacías allí?

A Danays Bautista

Cantaba en los pasillos del metro. El mundo le llegaba sin imágenes, a través de sensaciones oscuras. Ella devolvía sus impresiones con acordes de guitarra y cantos. Entre multitudes que corren sin sentido colaba su voz, su figura voluptuosa de caribeña errante. Allí estaba, lejos de una realidad donde el odio de un traidor convirtió al presente en un invidente incapaz de imaginar un futuro.

Saltó desde una falacia de medio siglo, ángel caído del paraíso inventado, desde la mentira más burda, desde el desgarro absoluto. Vino a una ciudad ajena víctima de la miseria provocada, con más desventajas de las que ya le tocaban. Cantaba por limosnas, retribuciones que toman el sentido de la libertad, de la esperanza. Huyó desde la utopía abortada, ahora la suerte se empeña en cercenarle la felicidad, pero su canto se ha hecho grande. Su vida es una denuncia, otra vergüenza para la atrocidad del castrismo.

domingo, 16 de mayo de 2010

Sonrían, los estamos observando.

Yoani Sánchez ha publicado en su blog grabaciones de audio en las que se puede escuchar lo sucedido en una de sus tantas detenciones. Según sus palabras fue detenida por personas vestidas de civil y con el amparo de la policía local. Personalmente no puedo evitar sentir un especie de ira dolorosa. La bloguera cubana se defiende sólo con palabras certeras y llenas de profunda civilidad. Resulta indignante imaginar la endeble figura de esta mujer siendo vapuleada por sicarios asesinos, émulos de esas hienas despiadadas que sembraron el terror en las cruentas dictaduras latinoamericanas incluida la batistiana.

A estos abyectos seres no me gusta llamarles marionetas, porque el hecho de no tener autonomía les puede conceder algún tipo de perdón. Ellos no son entes sin voluntad propia, si golpean a mujeres, torturan bajo el amparo de la dictadura en oscuras mazmorras, odian sin piedad y en mas de alguna ocasión asesinan con métodos ocultos, lo hacen obedeciendo órdenes pero siempre con libre albedrío. Si lo hacen es porque están dispuestos, son bestias que sacian sus bajos instintos mientras degustan la carroña que les lanza el régimen como retribución.

Ha habido varios intentos de acumular información sobre los sicarios de la dictadura castrista. Las nuevas tecnologías permiten hacerlo. Fotos, videos, grabaciones de audio, ahora son factibles de realizarse fácilmente y así los asesinos quedan identificados. Por otra parte, también he escuchado a las voces oportunistas de siempre y supuestamente en aras de la sanación nacional, intentar detener estas iniciativas de acumulación de pruebas para lograr algo de justicia en el futuro. A veces no es necesario blandir una porra contra un cuerpo frágil e indefenso para convertirse en un esbirro desalmado.

Creo que la recopilación de pruebas debe continuar como una especie de control social. Invertir el proceso de vigilancia es inevitable, ahora son las víctimas las que deben observar y asediar a sus victimarios. Lo más probable es que los asesinos comiencen a enmascararse pero el acto desesperado sería tirar del último jirón que le queda a la manta manipuladora de la dictadura castrista. De una vez y por todas quedaría al descubierto frente a la bobalicona opinión publica que defiende la atrocidad, que la revolución cubana es sólo un régimen totalitario y despótico como cualquier otro. Cincuenta años de sufrimiento creo que ameritan hacer nuestro el sentimiento judío que exige que no haya ni perdón, ni olvido. Justicia tendrá que haber, acumular las suficientes pruebas minimizarán posibles errores. El que nada ha hecho no tendrá que temer.


jueves, 15 de abril de 2010

En casa del trompo.

En Chile existe una costumbre muy arraigada culturalmente. Pretender hacerse el listo con el fin del trasquilar al prójimo es un hábito que inunda a la sociedad chilena. “Cagarse al otro”, como se dice en el argot andino, es una práctica que se observa en la más pedestre cotidianidad, que puede identificarse desde no cederle el asiento a una embarazada hasta en los vericuetos de la convivencia laboral, donde sobrevivir es titánico.

Parece ser que esta criticable forma de operar ha trascendido las fronteras del angosto país del sur. En Cuba, Max Marambio y sus secuaces han pretendido hacerse los listos. Creyeron que la ilusión de poder que los mandamases isleños le fabricaron ante sus ojos era real. La élite canallesca que desgobierna la isla hace medio siglo son expertos en manipular a los demás en beneficio propio. Estos chilenos, de procedencia izquierdista con inclinaciones terroristas, devenidos en acaudalados empresarios, pensaron que podrían escamotear algo de carroña a las ratas mas hábiles de toda la comarca.

La dinastía castrista los dejó alimentarse mientras tuvieran claro que en Cuba no hay espacio para hacerse el listo. Marambio ha cometido el error de querer bailar una danza que fue casi inventada y llevada al perfeccionamiento en la casa de los Castro. Ha intentado ser la rata más astuta y -como dicen en el barrio en que nací- siempre hay alguien mas cabrón que tú. La primera víctima ha caído, unos de los compañeros de tropelías de Marambio ha aparecido muerto. Creo que caerán más con mejor o peor suerte. La historia dirá cuan buen roedor es este chileno de antecedentes siniestros. Salvar la vida y algo de carroña creo que será lo máximo a lo que puede aspirar. La lección espero que le quede clara, en casa del trompo es muy difícil dar vueltas. A Marambio esta vez lo cagaron.

jueves, 25 de marzo de 2010

Alto y claro.

Roberto Ampuero es un reconocido escritor chileno que vivió en carne propia las atrocidades del pinochetismo y el castrismo. Aquí los dejo con un artículo que publicó en la edición digital del periódico El Mercurio donde cuestiona las actitudes ante ambas dictaduras. Su crítica se resume en que "Al final, todas las dictaduras —de izquierda o derecha— son iguales y se parecen incluso en el discurso justificador de su acción". Difícil no estar de acuerdo con él.


Leer artículo: Tres veces diecisiete


jueves, 18 de marzo de 2010

Represión a las Damas de Blanco.

Nuevamente las Damas de Blanco son reprimidas por el simple hecho de reclamar la libertad de sus familiares encarcelados. Europa ya ha condenado el acto, mientras seguimos esperando las declaraciones de condena de los países latinoamericanos. Reparen en las caras de odio que tienen los represores en esta serie de fotos que publicó El Mercurio, períodico de Chile, único gobierno de la región que ha denunciado la repudiable situación.

jueves, 11 de marzo de 2010

Tristeza caribeña.

Los cubanos cargamos con un estereotipo que a veces pesa como un estigma. Para el mundo somos una especie que se resume en ron, alegría y baile. Un pueblo capaz de soportar medio siglo de dictadura riendo, que prefiere como solución arrollar tras una conga que nos aleje de los problemas, lejos de casa, de los tuyos, de todo.

Ahora la muerte empieza a identificarnos. Locos, disidentes, sueños, todos muertos. La manta de la decadencia parece habernos vencido. Si antes nos reíamos de cualquier desgracia, recientemente solo encontramos respuestas en la posibilidad de morir. La vida se ha convertido en nuestra única moneda de cambio. Dejamos de vivir para que nos escuchen, obtener derechos o simplemente concluir el martirio.

Otra maldición azota a la isla. Desde que al símbolo de la dictadura le estallaron las entrañas de tanto odio, la podredumbre de su patético final ha ensuciado a la sociedad cubana. Mientras que el viejo dictador balbucea incoherencias, el sentimiento de destrucción cala el alma nacional quizá como otra forma de manipulación soez. El único futuro que aparece en la sociedad cubana, paradojalmente, es la muerte como una posibilidad de cambio.

Recientemente he leído – en el blog de Ichi - cartas de feroz tristeza, de un desprecio total hacia la propia existencia. Finalmente Cuba parece estar muriendo. Su cuerpo ya no encuentra defensas ante una enfermedad de tan larga data. Cada órgano se va depauperando, corroyéndose ante el cáncer de la traición y las promesas no cumplidas. La desidia, el absurdo y el odio han provocado la sepsis total.

La sociedad cubana ya no ríe. En estos momentos escoge morir y llorar las pérdidas. Prefiere fenecer aún respirando o lo que es lo mismo vivir sin sueños. Espero que la tristeza no se vuelva norma pero albergo la esperanza de que al menos sus causas llamen tanto la atención como la alegría de antaño.

martes, 9 de marzo de 2010

Cualquiera me sirve.

Héctor Lombard, un cubano que se destaca en la artes marciales mixtas.


jueves, 4 de marzo de 2010

Sirviéndole sushi a Skármeta.

He leído en CubaDebate las impresiones de Antonio Skármeta sobre el reciente terremoto en Chile. No tengo quejas sobre ellas, son previsibles, adornadas por su indudable talento y dejan ver someramente la inclinación política del escritor chileno.

Su articulo me ha hecho recordar el día en que conocí a aquella persona de apariencia bonachona y pluma aguda. Fue en el año 1995. Yo era un exiliado recién llegado a Chile, pobre y sin papeles. Trabajaba de camarero en un pomposo restaurante que estaba en el 10290 de la avenida Las Condes, en pleno barrio alto de Santiago. El lugar se llamaba Metro. Era bonito y amplio, tenía dos pisos y en el segundo se vendía comida japonesa.

Un día cualquiera llegó el escritor a comer sushi. Yo no sabía quien era y de no haber sido por su forma de escribir nuca hubiese querido saberlo. Toda la noche se comportó como un bastardo arrogante, hablando entre dientes y sin mirarme a la cara. Siempre con el comentario ácido a flor de labios, mostrando desdén hacia la persona que por hora y media le servía los típicos platos de la comida asiática. En Chile la hostilidad suele ser norma, pero este hombre la llevaba a máximos niveles. Nunca he sabido si su comportamiento fue por reconocer mi acento crudo y fuerte o porque simplemente estaba diseñado para obviar a cualquier ser que no considerara digno de su buen trato.

Después conocí sus obras literarias, de sus vínculos con la izquierda y que incluso había ganado un premio Casa de las Américas. Sentí en carne propia la hipocresía de la intelectualidad izquierdista. Ese hombre de supuesto pensamiento progresista tenía los mismos esquemas mentales del conservador mas acérrimo. Los sirvientes lejos de mi. Oh, gran pensador y conspicuo triunfador.

Con los años, las cosas han cambiado para mí. Ya este déspota disfrazado de bonachón no podrá darme el mismo trato. Espero que nunca más actúe de la misma manera con otra persona. Si algún día me lo encuentro le diré que es sólo otro ser abyecto hambriento de poder. Otro cínico que busca exorcizar sus culpas jugueteando con la izquierda.

miércoles, 3 de marzo de 2010

Era de esperar.

El gobierno cubano, ante el hecho irrefutable del asesinato de un preso político, ha comenzado -como es habitual- una campaña de descrédito contra el fallecido y su madre. Primero intenta hacer creer que Orlando Zapata era un preso pródigo en delitos comunes. Conociendo mínimamente la psicología de cualquier delincuente, se conoce que no hay nada más lejano de su comportamiento que la inmolación. Tales personas siempre buscan la manera de sobrevivir e imponerse a cualquier precio, sin reparos éticos ni morales. Las causas de la muerte de Zapata lo alejan abismalmente de este grupo.

En el caso de su madre, ha sido publicado un video que la muestra agradecida con el cuerpo médico que atendió al hijo. Lo primero que habría que destacar es el hecho de que la señora fue grabada en forma oculta y sin su consentimiento. Además de ser una prueba de los procedimientos que utiliza cualquier dictadura, si el gobierno cubano está tan seguro de su inocencia, ¿por qué utiliza estos criticables métodos? No hay que ser muy suspicaz para pensar que a esas alturas la actitud caritativa y comprensiva de los médicos también podría obedecer a una orden explícita del gobierno de no reparar en atenciones para con los familiares, teniendo en cuenta la muerte inminente de Zapata y la previsible reacción internacional que el hecho suscitaría.

Las obligaciones de cualquier galeno, en especial los cacareadamente ‘revolucionarios’, son curar, aliviar o en último caso consolar a sus pacientes. Es lógico que si cumplen con estas elementales funciones cualquier persona involucrada en la enfermedad de un familiar muestre agradecimiento. Con este particular gesto de la madre de Zapata no solo se demuestra su bondad personal, sino también se deja en claro que la oposición de los disidentes cubanos es contra la dictadura y no en contra de ningún otro cubano por confundido o manipulado que esté. Mostrarse hostil contra un médico que piensa diferente, sería reproducir lo mismo que ha llevado a Cuba al descalabro.

En el mismo video y utilizando métodos de invasión de la privacidad que son severamente castigados en casi todos los gobiernos sujetos a derecho, se muestra la grabación de una conversación telefónica. De lo único que se habla en ella es sobre tomar la difícil decisión –por parte de la madre- de asistir a una conferencia de prensa o ir a ver al enfermo Zapata. Decisiones a la que se tiene que enfrentar cualquier persona con responsabilidades importantes sobre sus espaldas.

La oposición a cualquier régimen, para ser efectiva, lógicamente se tiene que mover en el terreno de las reglas del juego político. Esperar de su práctica -por más loable que sea su fin- sólo altruismo y honor caballeresco sería condenarla al fracaso. No establecer estrategias de enfrentamiento y apoyo, especialmente ante gobiernos totalitarios y represivos, convertiría su accionar en el equivalente de intentar atrapar una serpiente venenosa armado solo de un saco para encerrarla.

Los métodos de persecución, represión (no niegan que Reina Tamayo siempre era escoltada por agentes), vigilancia y descréditos mal argumentados son los que sistemáticamente ha empleado la dictadura castrista durante medio siglo. Intentando ocultar su crimen, se delatan como violadores de los derechos más elementales de las personas.


martes, 2 de marzo de 2010

Canción a tono.

Esta canción se la dedico, con todo mi odio, a Willy Toledo y a todos los "gallegos" que piensan como él.

Lo que falta es sistema.

El absurdo que envuelve al caso cubano cada vez es más difícil de dimensionar. En medio de la insostenibilidad de un sistema que se ha ido carcomiendo las entrañas, es asombroso como aún se pretende subsanar –quizá desde un oportunismo latente- lo que por esencia ya no tiene remedio.

Ha surgido un nuevo paladín de lo desatinado. El secretario del partido comunista en Santiago de Cuba es la nueva atracción del circo que es la sociedad isleña. En un video aparece con un discurso lleno de exigencia paternalista, muy enfrascado en solucionar medio siglo de desidia, ineficiencia y desastres económicos. Este hombre se niega a aprender que los sistemas de corte totalitarios, con economías altamente centralizadas e ineficientes han fracasado.

En la noticia se pretende hacer creer que los problemas son generados por la indolencia de las personas. Se obvia que la desidia social imperante se ha generado, entre otras razones, por la ineficacia y pésima gestión del gobierno que este hombre representa. Con ingenuidad casi tontorrona, podría pensarse que el secretario del partido comunista lo que persigue es al menos mejorar un poco las cosas. La realidad es que llevan 50 años de ejercicio en la prueba y el error. Centrados sólo en el mantenimiento del poder a cualquier precio, el castrismo ha asumido el papel al que estaba irremediablemente destinado: ser uno de los últimos capítulos de la caída del comunismo con su inoperancia y represión implícitos.

El video no es más que otro intento por desviar la atención del problema real de Cuba, los déspotas que la han desgobernado durante tanto tiempo. Algo se puede rescatar de las palabras del secretario, el problema de la isla es “que no hay sistema”.

El video lo vi por primera vez en la página de Ichikawa.



El siguiente documental trata sobre lo mismo, lo único que es de hace 30 años.

Respuestas al imbécil.

Aquí habla el respetable Raúl Rivero.


Declaraciones de un imbécil.

Otro "perfecto idiota".


lunes, 1 de marzo de 2010

La pelota que se fue, se fue, se fue…

Argumentar que el paupérrimo desempeño del béisbol cubano en los últimos años se debe a la emigración de sus figuras más talentosas me parece simplista. El éxodo de deportistas podría influir en resultados puntuales –por ejemplo, el fracaso de un campeonato por la súbita pérdida de jugadores vitales - pero no ocasionar daños a tan largo plazo y de gran envergadura.

El futbol argentino y el brasileño sufren constantemente la emigración de los mejores jugadores. Este hecho, sin embargo, no ha evitado que ambos países continúen siendo potencias mundiales en este deporte. Según la verborrea discursiva del gobierno de La Habana, el saqueo por parte de los países ricos del talento regional es lo que evita que el deporte “pobre” obtenga buenos resultados. Otra gran mentira.

En el caso de Argentina existe un trabajo de cantera que garantiza la mantención de la calidad. El éxodo de jugadores es un fenómeno conocido y por tanto se puede controlar y planificar. Por otra parte, la venta de deportistas es una de las fuentes principales de ingresos para la industria futbolera. Lejos de perjudicar la actividad es beneficioso que Argentina sea una exportadora de jugadores. Lo que se hace en las divisiones inferiores del futbol argentino no solo es captar y mejorar la técnica de incipientes talentos, también tiene una función social importante. Brindan –además de la oportunidad de brillar deportivamente- un apoyo educativo que sirve al menos para superar la pobreza de aquellos que no logran llegar al estrellato. Estos programas se financian parcialmente con los beneficios que se obtienen de la exportación de jugadores.

El caso cubano ya tiene problemas profundamente estructurales. Por años se han seguido métodos de entrenamiento ya arcaicos y copiados a los Soviéticos, que por su parte han obtenido buenos resultados en la mayoría de los deportes menos en el béisbol. La dictadura castrista también ha arruinado la calidad beisbolera cubana con la politización y manipulación extremas. Al igual que en la economía nacional, los “experimentos” de los Castro han causado el descalabro de la industria deportiva cubana. Recuerdo cuando empezaron con el tema del entrenamiento en la altura y las consecuencias que trajo la locura para algunos peloteros. Después de vivir a más de 2000 metros sobre el nivel del mar, el gran bateador Orestes Kindelán estuvo como un mes tratando de recuperar su forma física y así la fuerza que le permitía conectar jonrones.

En Cuba el trabajo de cantera prácticamente ya no existe. Como en el paraíso comunista la pobreza es irreal, ya no se busca el talento en los barrios marginales. De esos mismos barrios en otras latitudes salieron Pelé, Maradona y Garrincha. La pelota de manigua, esa que se jugaba descalzo y sin careta el catcher, ha desaparecido. El desmembramiento inevitable de un proyecto ideológico insostenible también ha influido en la ruina de la pelota cubana. Todo en la isla se ha ido derrumbando y con ello también ha ido muriendo nuestra pasión deportiva por excelencia. Mientras tanto no queda otra que seguir viendo brillar a nuestros peloteros desde lejos, a la espera de un batazo salvador que inevitablemente tendremos que dar nosotros mismos.

jueves, 25 de febrero de 2010

No todo es silencio.

..."el silencio cobarde apaña la maldad que oprime"...

Canción Si se calla el cantor



El presidente electo de Chile también manifestó su repudio ante la muerte de Orlando Zapata.

Leer aquí: http://www.emol.com/especiales/2010/nacional/gobierno_de_pinera/despliegue_noticias.asp?idnoticia=400441

El otro dolor.

Creo que lo peor de una muerte es la ausencia de alternativas. Ante su declaración de final no hay nada que hacer, en ese momento sólo existe dolor, impotencia y desoladoras sensaciones. La parca es la asesina de las posibilidades, con ella termina todo. La vida siempre lleva consigo el encanto de la esperanza. Aunque te presionen el cuello, te amordacen, te lancen lejos de los tuyos convirtiéndote en un zombie habitante de los recuerdos, mientras se tenga aliento otra oportunidad puede florecer.

Ahora, la madre de Orlando Zapata, ve en un ataúd la representación de un genocidio de esperanzas. Ante su cuerpo debe recordar cada fragmento de la vida del hijo asesinado. Los insoportables dolores del parto, la primera sonrisa, el primer paso, las incipientes palabras que mas tarde, cargadas de un sentido libertario, lo llevarían a la muerte. El delito de Orlando únicamente fue ese, verbalizar su desacuerdo contra la dictadura de los Castro, expresar sus deseos de libertad.

El hijo fue asesinado por inanición. La imagino rememorando cuanto tuvo que sufrir para alimentarlo, venciendo la precariedad de un sistema que lo único que ha sabido generar es odio y dolor. De nada sirvieron los esfuerzos para que a su niño no le faltara nada, al final la dictadura mediante una cruenta paradoja logró que muriera de hambre.

El exterminio de Zapata Tamayo es una amarga metáfora, representa a un pueblo que igualmente muere de hambre, no sólo de alimentos sino también de libertad y justicia. Muestra el raquitismo de nuestra realidad, famélicos seres que viven bajo el terror y el dominio de una dictadura de medio siglo. El dolor de la madre de Orlando no se subsanará con nada, sólo lo podrá aliviar el florecimiento de nuevas esperanzas. En nosotros está la tierra fértil, el alimento para la resurrección de un pueblo que no puede seguir callando. Sea nuestro abono el no olvidar.

Pd: Nuestras sinceras condolencias para la señora Reina Tamayo, desde la distancia le pedimos que encuentre fuerzas en la razón de las ideas de su hijo.

Atentamente, Los Kovacs.


sábado, 20 de febrero de 2010

Recuerdos.

El peor y el mejor de los tiempos.

Leer en Una tarde memorable.

viernes, 19 de febrero de 2010

Arrollando en Bilbao.

Elha Kovacs

No son tan majestuosos y multitudinarios como los de Río ni tan llamativos y pintorescos como Mardi Gras, pero los carnavales de Bilbao tienen un encanto especial. Y ese encanto tal vez tenga que ver con su sencillez, con la forma en la que, quien tiene el privilegio de asistir se lo puede apropiar, hacerlo suyo.

El carnaval de Bilbao es un espectáculo que protagoniza la gente que habita esta ciudad. Las cuadrillas de amigos, las familias, viejos y niños, hombres, mujeres, homosexuales, se preparan, con algo de antelación, para salir a la calle con sus originales disfraces. Por la Gran Vía desfilan las carrozas, mostrando la diversidad y apertura de una ciudad habitable. El desfile termina pronto y sigue la fiesta en los bares, que es decir en la calle.

Mientras vivo por segunda vez esta experiencia me regocijo por la fortuna de experimentarla en familia, pero en silencio me pregunto cómo pudo morir en Cuba el carnaval.

jueves, 18 de febrero de 2010

Aaaayyyy que miedo.

Muñequito cubano.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Recuerdo de mi primera Makarenko.

La señora Kovacs nos regala una experiencia inolvidable.

"De mi memoria no se ha borrado aún como la aprendiz de profesora, tras un arranque de ira, partió mi regla recién estrenada con un golpe que le propinó a Raimundo, el niño más inquieto del grupo. Afortunadamente, como regalo de fin de curso de septiembre de 1978, mis padres me contentaron con la vuelta al colegio del que no debí salir de haber tenido seminternado."
Seguir leyendo en:
http://eichikawa.com/2010/02/recuerdo-de-mi-primera-makarenko.html

martes, 16 de febrero de 2010

Rugby y picadillo de soya.

Ichi encontró esta joyita. De madre jugar rugby después de comerse el "rico" picadillo de soya.

http://teveo.icrt.cu/3fjjp7/

Falacias 2: Calidad Educacional.

Toda la estructura social cubana es una madeja de engaños y en ella el sistema educacional cubano ha sido una hebra fundamental. A mediados de los años ochenta graves casos de fraude a nivel institucional comenzaron a menoscabar unos de los “logros” que más intentaba enarbolar la revolución cubana. Ante la normativa que se debía cumplir con el plan anual de aprobados, las direcciones de los establecimientos educacionales comenzaron a presionar a los profesores. Poco a poco los educadores se unieron a la locura y empezaron a ser parte de la falsedad. De pronto, toda la enseñanza elemental estaba plagada de alumnos geniales.

Por aquella época las respuestas a los exámenes eran dictadas por los profesores. No había suspensos y los alumnos con dificultades seguían avanzando de curso sin cumplir con los requisitos elementales. Recuerdo que en una beca las respuestas fueron transmitidas por la amplificación local. Ocurrió que la que dictaba era alumna y en una de las soluciones dijo por los altoparlantes H veinte – refiriéndose al agua- en vez de H2O. No fueron pocos los que copiaron la burrada.

Fue así que el fraude masivo se hizo norma. En el verano del 86 explotó el escándalo. Se prohibió, con las mismas maneras que se instauró. La debacle fue inevitable. La realidad demostraba que la mayoría del alumnado no cumplía con los requisitos básicos para aprobar los cursos en que estaban. Mi aula completa de noveno grado suspendió matemáticas. Después, unos cuantos aprobamos en el examen extraordinario. Ese año, ante la vergonzosa situación se realizó un tercer examen de manera excepcional. Sin embargo, la mediocridad del modelo cubano de educación ya había sido descubierta.

No recuerdo si por aquello hubo defenestración de culpables. Creo que merecían castigo, pero con la atenuante de que el principal responsable de la farsa fue y será un viejo loco que vive sumido en la ilusión de que es el redentor de Cuba.

lunes, 15 de febrero de 2010

Falacias 1: Profesores de nuevo tipo.

Mi escuela primaria estaba frente al paseo del Prado en La Habana. Era una antigua casona que imagino sus dueños se vieron forzados abandonar cuando el castrismo llegó a la isla. Cada habitación del lugar fue convertida en pequeñas aulas y junto con las horribles ampliaciones que se hicieron, la casa fue transformada en una cuartería educacional.

De aquella época recuerdo particularmente cuando cursaba el tercer grado. La que había sido mi profesora hasta aquel momento – Marta Lavín se llamaba y según mi madre era de las maestras de verdad, de las de “antes”- tuvo que abandonar el oficio. Su garganta, después de tantos años educando, no soportó más. Fue reemplazada por una regordeta Makarenko que aún no terminaba sus estudios. Llegó con el uniforme típico con dos tonos de verde, esos que incluían aquellas faldas que eran una especie de short con babero. En aquel tiempo muchas de ellas tuvieron que salir a cubrir el déficit de profesores que se estaba produciendo. Era el año 1980.

Mi nueva profe era una chica de los nuevos tiempos. Llena de moral socialista, liberación sexual y mediocridad a toda prueba. En un viaje que hicimos a Tarará, recuerdo que adquirió fama de ninfómana. A la gordita le gustaba retozar. Poseía grandes habilidades sociales, podía pasarse media hora de una clase hablando con otra persona en la puerta del aula. Nosotros éramos felices, en vez de estar aprendiendo a sumar, jugábamos. Misteriosamente nuestras horas de educación física se vieron triplicadas. Pasábamos mucho tiempo jugando al burrito 21 en el Prado. Total, teníamos 8 años y toda la vida por delante para aprender.

No recuerdo el nombre de esta mujer, sólo su cara y fisionomía. Más allá del desastre que pudo causar a corto plazo en mi educación, no he podido olvidarla por otro motivo. Mis padres decidieron quedarse en Cuba a pesar de que toda mi familia, a excepción de un tío que vivía con nosotros, habían decidido marcharse cuando la desgracia de la dictadura comenzaba. Mi tío por estar en edad militar tuvo que quedarse y prácticamente ser criado por mi madre. Ese año se pudo marchar. La sombra de la duda cayó sobre nosotros. Mi profesora, al conocer la noticia, olvidó su liviandad y falta de profesionalidad. Con una cara circunspecta que descuadraba con su licenciosa vida sexual y dudoso desempeño docente, me interrogó sobre si mi familia tenía intenciones de abandonar Cuba. Yo no contesté nada. Para qué quería la información, sólo Dios sabe. Prefiero pensar que era burda chismosería. Todavía busco su rostro y no sé porque me la represento meneando su regordete culo en Miami al son de alguna orquesta de intercambio.

viernes, 12 de febrero de 2010

Hoy como ayer.

Chávez, al igual que su mentor Castro, miente descaradamente. Reconoce al final del video una verdad ineludible.

jueves, 11 de febrero de 2010

Más sufrimiento provocado por la dictadura castrista.

Aquí se muestran imagenes del entierro de Gloria Amaya, madre de dos prisioneros de conciencia cubanos. Mis respetos para todos los que en Cuba se oponen abiertamente a la dictadura lejos del oportunismo servil.
"Si un traidor puede más que unos cuantos, que esos cuantos no lo olviden facilmente"




sábado, 6 de febrero de 2010

Necesitamos inspiración.

Después del dramático fracaso de la revolución cubana, los isleños hemos perdido la capacidad de crear y creer en sueños colectivos. Ningún objetivo nos une como nación. El desmembramiento de la sociedad cubana provocado por la dura necesidad del exilio y la manipulación dictatorial, ha borrado cualquier posibilidad de unirnos en aras de un bien común.

El lógico deseo del fin de la dictadura tampoco nos une. La intención de acabar con medio siglo de atropellos y desgracias, se atasca en el fango que provoca la mezcla del oportunismo, la liviandad, el radicalismo ciego y la falta de una alternativa pensada, al mismo tiempo que viable. Ni siquiera una de nuestras religiones preferidas – la pelota- puede aglutinarnos. El equipo Cuba post revolución, entrampado en la politización, nunca ha fungido como una selección nacional que represente las expectativas de todos.

En la película Invictus, se recrea como Mandela y el equipo de rugby sudafricano pudo unir a un país dividido por lacerantes y profundas heridas. El personaje que encarna a Mandela, propone que la esquiva y difícil unidad sólo se puede lograr partiendo del ejercicio del perdón y generando inspiración. Finalmente, el equipo sudafricano gana la copa mundial, pero el verdadero trofeo fue conseguir que toda Sudáfrica creyera que un sueño común era posible.

Cuba necesita de lo mismo. Más que un líder que sea el catalizador del milagro, es necesario que recuperemos la capacidad de soñar como nación. El tipo de quimera poco importaría siempre que nos saque del lodo de cincuenta años de desencuentros. Una selección nacional de pelota que incluya a los jugadores cubanos de todas las latitudes y que permita recuperar la calidad de antaño podría ser un bonito comienzo. Un equipo Cuba democrático que gane campeonatos que satisfagan a todos, es un sueño en el que muchos nos aventuraríamos a creer. Para que ese deseo se haga realidad los cubanos deberíamos inspirarnos en las palabras con que finaliza la película: ser amos de nuestro destino y capitanes de nuestras almas.

PD. Le apuesto a Ichi un lechón asado a que Morgan Freeman gana el Oscar. En agosto viajo a Miami para saldar la apuesta.

El equipo de Rugby argentino con la nación tatuada en el alma.

miércoles, 3 de febrero de 2010

A cada cual según su pecado.

La gracia fundamental del cristianismo radica en el perdón. Siempre es conveniente tener bajo la manga el as de la redención. Los malos comportamientos deberían ser borrados con un último y apurado arrepentimiento. La trampa está en que hasta ahora no existe prueba de que el ardid resulte. Nadie ha recibido mensajes como “Coñooo, me salvé” o “Me embarcaron, ahora estoy – literalmente- en llamas por toda la eternidad”.

Fidel Castro aprendió bien la lección en el conspicuo colegio católico donde estudió. Aparte de ser un artista en prometer cosas sólo comprobables después de la muerte, también ha usado las herramientas del pecado y el perdón con maligna astucia. Los pecados casi siempre conllevan sentimientos de culpa y ésta inevitablemente reprime el comportamiento mientras se busca el ansiado perdón. El castrismo se ha empeñado en crear un manto de culpabilidad sobre la sociedad cubana. Ha construido un tejado de cristal sobre los cubanos y es lógico que nadie se atreve a lanzar pedradas.

La revolución cubana fue una máquina de circunstancias extremas y embriagantes. Mientas el dictador elucubraba cómo eternizarse en el poder, la mayoría del pueblo cubano se involucraba en los nuevos tiempos. Así comenzaron a caer sobre los cubanos todo tipo de culpas, que más tarde los privaría de usar el derecho a reclamo. Una victoria deportiva dedicada al líder, una canción, un discurso, ser elegido símbolo de la represión por interpretar el personaje de una serie de televisión popular, se convirtieron en pecados que colocaron a muchos en la espera interminable del perdón.

En el caso de Cuba hay pecados de variadas calañas, algunos impuestos y otros asumidos por propia decisión. El impacto negativo de ellos determinará cuál será el castigo de quien los cometa. Algunos incluso ni califican para tal denominación. Marquetti le adjudicó a la revolución la autoría de unos de sus jonrones más famosos. También estuvo en la batalla de Girón – Bahía de Cochinos para el que así lo quiera- y sin embargo creo que nadie lo recuerda por eso. Para mí y otros muchos, ha sido el mejor primera base de los Industriales, el de los batazos decisivos, el ídolo del número cuarenta en su espalda. El pelotero ya está perdonado. Otros con semejantes pecados deben mirarse en su espejo y vencer la culpabilidad. Los de los pecados horrendos tendrán que seguir esperando por el castigo.

martes, 2 de febrero de 2010

Más de la señora Hebe de Bonafini.

Esto es lo que se dice de la señora que insulta a las Damas de Blanco.


Víctimas de segunda clase.

Ser disidente en Cuba requiere, además de un inmenso valor, una compasión que confluye al martirio. Las personas que escogen este camino no sólo se enfrentan a la visceral represión del sistema. También deben soportar la indolencia de un pueblo, que de tanto ser manipulado, ya no quiere reparar en los verdugos ni apoyar a los que se oponen a la fuente del sufrimiento cubano. Los disidentes están solos, luchan por una causa en la que los principales afectados prefieren pensar en otra cosa. Ni gobernar, ni ser gobernados, simplemente escapar.

Los que se oponen al castrismo en la isla no sólo deben lidiar con la indiferencia de su propio pueblo. Fuera de Cuba la dictadura parece haber extendido parte de su embrujo. Mientras el mundo repudia a regímenes totalitarios de toda índole, los Castro siempre alcanzan algún tipo de perdón. Las atrocidades que se cometen en Cuba y las víctimas que generan parecieran ser de otra clase. Un cubano perseguido, un prisionero político, un pobre loco muerto no generan las mismas sensibilidades que los de otras latitudes.

Las Damas de Blanco, mujeres que ejercen el derecho elemental de abogar por sus familiares reprimidos, muchas veces son denostadas incluso por movimientos que defienden causas muy similares. Tal es el caso de las Madres de la Plaza de Mayo y su fundadora Hebe de Bonafini. Esta argentina, señora de apariencia bonachona y hablar procaz, ha insultado de manera inadmisible a las cubanas. Las ha tildado de representantes de la muerte y el terrorismo. La señora Bonafini parece una amarga muñeca sobre las rodillas del ventrílocuo Fidel Castro.

Con estas declaraciones no solo se convierte en la voz de un dictador, también menosprecia al pueblo cubano. Según la argentina, nuestras víctimas no merecen ser defendidas y por ende respetadas. Sobre Bonafini vuelan sospechas de algunas atrocidades que ha cometido utilizando la causa de los desaparecidos argentinos. Esto deberá evaluarlo el pueblo argentino. Para el cubano solamente exijo respeto.

lunes, 1 de febrero de 2010

Arrastradera Kafkiana.

Aquí les dejo un video que supera al surrealismo, creando una nueva categoria aún sin definir. No se pierdan la verborrea incoherente del locutor. Espero que me queden pocas cosas como esta por ver. Los comentarios que aparecen en el video no son míos.



Gracias a Dios existe el cuero. Aquí va una parodia a propósito de la canción.



domingo, 31 de enero de 2010

En mi barrio te hubiesen quitado la merienda.

Después de leer la entrevista a Paulito FG me doy cuenta que este tipo es un cara e` guante. Nunca ha tenido que batear la pelota rápida y afuera . En el estribillo de su nuevo hit dice: “Yo no nací en el Vedado, ni siendo hijo de artista, yo nací por Marianao y me crié en Buena Vista./ Yo le canto al amor, a los hombres a las mujeres, también le canto a los niños y a lo que mi gente quiere; y es que yo canto pa’ todos y eso es lo que me mantiene, yo canto pal’ que le sobra y también pal’ que no tiene".

Salsero de nuevo tipo, aquí te dejo música con la cruda esencia del barrio marginal. Nunca es tarde para aprender.

Ilusa protección.

Yoani Sánchez una vez más denuncia atropellos en el blog que funge como su voz, como la voz de muchos. La bestia dictatorial sigue acechando. Lanza zarpazos en busca del silencio, del sometimiento, intentando generar carroña sometida. A la bloguera y su familia no le darán la mas mínima oportunidad de escape, de aire libre. Han creado para ellos unos barrotes personalizados, proyección de los enormes que rodean a la sociedad cubana.

Cuando Yoani Sánchez comenzó a ganar premios y convertirse en una figura conocida internacionalmente, muchos creyeron que había alcanzado cierta inmunidad. Quienes pensaron así no conocen la esencia de las tiranías ideológicas. Sánchez puede ser maltratada en cualquier momento, física y emocionalmente, incluso – y ojalá no suceda- una mano cruel puede arrancar su aliento. La dictaduras no tienen moral ni reparos éticos, ¿qué les puede importar las condenas internacionales por la vida de una persona cuando cercenan las de miles?. Lamentablemente la bloguera y su familia no tienen ninguna protección.

Tienen un estatus de “libre” sometimiento. La dictadura crea una ilusión de supuesta protección para generar dudas sobre ella. Todos saben que el castrismo no es benevolente con las piedras en sus botas avasalladoras. Es lógico pensar que si las permite es porque son parte del sistema represivo. Así, premeditadamente, buscan ensuciar su imagen y enturbiar su credibilidad, dando una impresión de supuesta permisibilidad. En la realidad, las botas pisotean despiadadamente la existencia de Yoani y los suyos, buscan que fenezcan de terror, intentan que se rindan. Afortunadamente no están dispuestos a hacerlo, son personas de honor y cuentan con la fuerza de la razón.

Teo, el hijo de Yoani, no quería ir a celebraciones de “viejos”. Imagino que no sea sólo por las eternas diferencias generacionales. Quizá para el adolescente lo viejo significa el rostro de la opresión que hace sufrir a sus padres, es la representación de una senil dictadura que arruina su presente y le arrebata el futuro. Teo ya habló y creo que no ha sido fruto de una adolescente rebeldía. Es un reclamo elemental de justicia, una voz que espero crezca, gritos frescos, nuevos, que acaben con el sufrimiento de Cuba.

Yoani imagina a las fieras asustadas. Creo que no lo están. Las hienas sólo se asustan cuando alguien más fuerte les arrebata el alimento. Desafortunadamente este momento todavía no llega. Las hienas de los Castro aún no temen. Se cobijan bajo el amparo de los tiranos como engendros amorales que matan por carroña. Todavía se sienten poderosas, pero el futuro ya las hará temblar. Pagarán caro tanta culpabilidad.

lunes, 25 de enero de 2010

Nos están vigilando.

Castro siempre ha sido muy empeñoso en demostrar que tiene control e información sobre todo. Efectivamente ha creado siniestros mecanismos para controlar, pero su principal objetivo es generar la percepción de que todos los cubanos están vigilados. Ha logrado su objetivo. Los cubanos acarreamos con lo que podríamos llamar el síndrome de la sospecha. Aún en el exilio, no pocas veces miramos a otro cubano con recelo, sospechando si es agente o no del aparato de la seguridad cubana.

La manipulación de los medios ha sido vital para lograr tal fin. Primero fue “En silencio ha tenido que ser”. El serial nos inducía a creer que ser espía era un oficio loable y para llegar a ello cualquier sacrificio y mezquindad eran permitidos. Conseguir semejante puesto significaba un honor irrenunciable, al que todos los cubanos deberían aspirar. Algo así como “chivateo, luego existo”. La manipulación del programa llegaba a tal punto que al hijo del agente no le importaba la ausencia del padre, su única preocupación era que éste no fuese un contrarrevolucionario.

Cómo olvidar el abrazo de los actores Mario Balmaseda y Patricio Wood –contacto e hijo del agente respectivamente- al saber este último que su padre era chivatón. Toda la escena tenía por fondo a la universidad de La Habana, de donde no pocos oportunistas chivatos han salido.

Después vino “Día y Noche”. Aquí la chivatonería salía del ámbito del espionaje internacional para centrarse en la delincuencia común. Pretendía generar una paranoia de control general. Hasta los taxistas estaban al servicio del aparato represor. El énfasis en que sólo la delincuencia era permitida estaba claro. La disidencia ni se nos podía ocurrir. Recuerdo la escena en que un caco era apresado y como atenuante aducía que era un “delincuente revolucionario”. La serie tuvo un gran impacto. Estando en Chile, muchos años después, un cienfueguero le decía “el Tavo” a un compatriota que residía en aquel país. Era la forma de manifestar su sospecha acerca del otro, dadas las ambivalencias que mostraba sobre el castrismo. Lo peor es que creo que tenía razón

Esa ha sido una de las maldiciones que Castro ha dejado caer sobre nosotros. Ha sembrado la desconfianza de manera tan profunda que ni siquiera ya podemos unirnos en la simpleza. Cabrera Infante dijo que Fidel Castro se quedó con el todo y nos dejó la nada. Yo creo que además nos permeó el ser.

Aqui les dejo con el patético reclutamiento y peor conflicto interno de Tavo. El desenlace tiene una marcada tendencia gay.

domingo, 24 de enero de 2010

Boncó Junior.

Sammy Davis Jr. tuvo un triste pasar por el Rat Pack. En las actuaciones era molestado sistemáticamente con chistes racistas. Era el único negro del grupo y muchas veces fue criticado por prestarse para tales situaciones.

El personaje de Boncó Quiñongo me recuerda algo de esto. Solamente el seudónimo ya tiene una fuerte carga racista. Cuando el personaje apareció en el popular programa Sabadazo, iba vestido como un guapo setentero, estigma que identificaba principalmente a las personas de raza negra. Hablaba incorrectamente y con acento gutural, tratando de imitar la forma de expresarse que se le achacaba a los negros. Cuando se enojaba, amenazaba con “engorilarse”, haciendo alusión al símil que hostilmente se asociaba a la raza negra en Cuba.

El personaje era la representación de todos los estereotipos raciales, satisfaciendo con ello la visión discriminatoria que suele tenerse de los negros. Poco sabe el espectador, sin embargo, que Boncó estudió en la universidad, la misma a la que yo fui en Cuba. Tampoco es conocido que es de hablar pausado y que se viste normalmente. El actor y el personaje son opuestos. Entonces, ¿por qué ser un ícono de la estigmatización de su gente?


En Cuba como en Miami, Boncó se ha movido en un mundo de blancos. Imagino que imponerse no debe haber sido fácil. Puede ser que, al igual que Sammy Davis, esté abriendo el camino para los que vienen atrás pero el precio que está pagando es muy alto. Ya es hora de que para el beneficio artístico y personal, Boncó de espacio a otro personaje. Quizá más digno para el actor y los suyos.